domingo, 8 de abril de 2007

Julián Villanueva Olza

Ante los milicianos: "No me da usted miedo. Ni usted ni su fusil. Podrá matarme si quiere, pero no le temo, porque hay otro Juez supremo ante el cual nos hemos de ver las caras usted y yo.... Sabed que no me da miedo la muerte. Ofrezco mi vida por Dios y por las almas. Os perdono este crimen que vai a cometer conmigo y pido a la Divina Misericordia que acepte mi sangre por vuestra salvación".

No hay comentarios: