El canto a Jesucristo que los jóvenes mártires de Barbastro entonaban en 1936 en el salón-cárcel y camino del martirio es un verdadero himno de héros
Jesús, ya sabes, soy tu soldado.
Siempre a tu lado yo he de luchar.
Contigo siempre y hasta que muera,
una bandera y un ideal.
¿Y qué ideal?
Por ti, Rey mío, la sangre dar.
Si en el camino, hueste maldita:
¡atrás -me grita- atrás, atrás!,
si me disparan sangrientas balas,
daráme alas el ideal.
¿Y qué ideal?
Por ti, Rey mío, la sangre dar.
Virgen María, Reina del Cielo,
dulce consuelo dígnate dar
cuando en la lucha tu fiel soldado
caiga abrazado con su ideal.
¿Y qué ideal? Por ti, mi Reina, la sangre dar.
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1 comentario:
Este himno, conocido entre los Estudiantes, como el Himno del Soldado, fue compuesto por el P Ajuria en 1909 cuando estaba en Corisco de Misionero. Tiene varias estrofas. Más. La última dirigida a la Virgen es obra del P. Luna, a instancias del P. General.
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